Carlos Javier Galán, abogado de afectados por estafas de prestamistas:
“SI LA AUDIENCIA NACIONAL ACEPTA LA COMPETENCIA, ESTOS CASOS DARÁN UN
VUELCO JUDICIAL”
Carlos Javier Galán
es abogado, titular del despacho Alberche Área Jurídica en Madrid, generalista
pero dedicado con preferencia al Derecho del Trabajo. Es autor de cinco libros
divulgativos sobre cuestiones laborales, formador empresarial y docente de la
asignatura de Proceso Laboral en un Máster universitario. Y, sin embargo, desde
hace dos años se ha destacado por la denuncia de un fenómeno tan ajeno a su
especialidad como son las redes delictivas de estafas en préstamos de capital
privado. Defiende a no pocas víctimas ante los tribunales y es asesor jurídico
de la asociación de afectados Stop Estafadores. En XORNAL GALICIA hablamos con
él sobre esta realidad, a menudo dramática y, sin embargo, tan poco conocida.
- ¿Qué hace un
abogado laboralista como usted perdido por el reino de los estafadores?
Jajaja, bueno, tal vez no tan perdido… No me ha resultado
fácil pero, a base de ser laborioso, al estilo hormiga, he acabado manejándome con
relativa soltura entre estas redes delictivas.
Esta materia llegó a mí por azar, a través de un amigo al
que no podía decir que no. Cuando me explicó su caso, vi muy claro que me
encontraba ante una estafa. Y tan minuciosamente diseñada que no podía ser la
primera vez que se ponía en práctica. Tiré del hilo y me acabé encontrando con
una realidad ignorada y con un volumen de afectados y un montante económico que
es impresionante.
- Hay quienes nos
aseguran que, como abogado, es el mayor experto en España en las redes de
estafas de prestamistas de capital privado…
Nunca me lo he planteado en términos de ranking. Hay
compañeros de otros despachos que hacen una excelente labor y conocen muy bien
este terreno. Y si acaso soy experto, desde luego le aseguro que es muy a mi
pesar… Me gustaría que esta realidad no existiera y que nunca hubiéramos tenido
que investigarla ni combatirla.
- Sr. Galán, ¿hay
controles adecuados sobre el sector de los préstamos de capital privado?
En el país de Gescartera, Forum, Afinsa, los pagarés de
Nueva Rumasa, los swaps, las preferentes o las acciones de empresas como Gowex, no parece sensato sostener, en general, que los controles funcionen adecuadamente.
Así que resultaría sorprendente que los préstamos no bancarios fueran una
excepción.
El Defensor del Pueblo venía advirtiendo en sus informes
desde 2006 sobre la falta absoluta de control en el sector, sin que se le
hiciera el menor caso. Cuando por fin el gobierno se decide a promulgar una
ley, ya en 2009, no sitúa estos préstamos bajo la supervisión del Banco de
España o de la CNMV, sino bajo la competencia genérica de los organismos de
consumo, que ni tienen medios para esto, ni están especializados, ni nos consta
que realicen inspecciones de oficio a empresas de préstamos.
Cuando se descubra que hay millares de familias estafadas
por redes delictivas de supuestos prestamistas privados, ¿también fingirán
sorpresa y nos dirán a los ciudadanos que no se explican cómo han podido fallar
los controles? Pues ya se lo anticipo yo: porque en la práctica no existen.
- Pero esa ley de
2009 creó registros autonómicos y un registro estatal, ¿no?
La realidad es que, cinco años después de promulgarse la ley,
los registros autonómicos no existen. El Registro estatal en teoría sí, pero
sigue sin estar plenamente operativo para su consulta y no se le está dando
ninguna utilidad práctica… Hasta me atrevería a decir que ha sido
contraproducente, porque se ha acabado convirtiendo en una especie de
“sello de calidad” para los estafadores.
Se inscriben en el mismo sin que ello les suponga ninguna vigilancia y a
continuación lo hacen constar en su publicidad: “inscrito en el registro
estatal…” para procurarse apariencia de seriedad y engañar mejor a sus
víctimas. Baste decir que el inscrito con el número 1 en ese registro es,
significativamente, el que está imputado judicialmente en un mayor número de
estafas.
- De forma que
cualquiera lo pueda entender, ¿en qué consiste el engaño que ustedes denuncian?
Hay varias estafas diferentes, pero la más común es
conseguir que la víctima firme ante notario un capital superior al que
realmente recibe, con un plazo de devolución brevísimo (a veces les dicen que
es un “préstamo puente”, pero nunca llegará el definitivo), con unos intereses
de demora abusivos y valorando su vivienda para subasta en una cifra irrisoria.
Porque de eso se trata, no de que paguen, sino de apoderarse de un inmueble por
una cantidad ridícula. Dicho así, puede parecer burdo, pero yo siempre suelo
recordar que es una operativa que está elaborada con detalle en sus aspectos
legales, económicos y psicológicos. Y depurada con la práctica de años de
estafar con impunidad.
- Pero todo eso se
firma ante notario, ¿no se advierte a los prestatarios? ¿no se les insiste si
son conscientes de que lo que realmente están firmando, unas condiciones que
llaman la atención?
Le hago una observación: se firma ante algunos notarios, “casualmente” siempre los mismos. Y ya se
imaginará que no los elige el prestatario, sino el prestamista.
Al titular de una notaría concreta, que parece ser la favorita
de todas las tramas de estafas que se mueven por este país, le pregunté hace
poco en un Juzgado de Instrucción, donde compareció para ser interrogado como
imputado, si no le pareció oportuno advertir a una prestataria de que su vivienda,
un piso de 75 m2, se la podrían adjudicar por el precio de un coche, 20.000
euros, con lo cual se quedaría sin casa y seguiría debiendo dinero. Y me
contestó que esto de las tasaciones “es muy variable” y, literalmente, que a él
“no le compete” advertir. Dijo que el valor ya figura en la escritura y que se la
había leído.
- ¿Y ese engaño de
que el capital que figura en escritura no es el realmente recibido se puede
probar ante un Juzgado? Porque habiéndolo firmado ante notario parece muy
difícil…
Es muy difícil, no cabe duda. La dificultad probatoria es
tremenda. Pero creo que no es del todo imposible.
Aunque durante años siempre se hacía constar que el capital
se había entregado en metálico –que ya es de por sí llamativo: decenas de miles
de euros en cada operación siempre en efectivo-, los flujos de dinero de alguna
forma dejan huella y para eso están las periciales... Y si se investigase toda
la operativa de la trama y no cada operación por separado, estoy seguro de que
las conclusiones serían diferentes.
Por otro lado, en varios juzgados hay grabaciones hechas a
los intermediarios, donde reconocen estos aspectos de forma inequívoca.
E incluso hubo una detención policial dentro de una notaría,
en la que se pudieron constatar objetivamente varios extremos que confirman el
modus operandi denunciado.
Y luego no hay que olvidar la coincidencia de testimonios,
que es abrumadora. Que una persona diga que ha recibido una cantidad pero que
firmó otra superior, puede parecer poco demostrable. Pero si hay centenares de
personas, de distintos puntos de España,
que actúan bajo distintas direcciones letradas, que es materialmente imposible
que se hayan puesto de acuerdo y que, sin embargo, en denuncias presentadas en
distintas fechas en el tiempo, relatan un mismo modus operandi y señalan a las
mismas personas…, me parece que merecen cuando menos atención judicial. ¿Cuál
es la explicación si no? ¿Que es una maniobra orquestada, a lo largo de los años
y por personas que ni se conocían entre sí? ¿Que es mera coincidencia?
- Cuando comenzó con
esta lucha, ¿confiaba en que se podría abrir una causa global contra esa trama
a la que acaba de hacer referencia?
Mire, en España, todavía no se ha abierto ni siquiera una
causa global para investigar las tramas organizadas de robo de bebés y
adopciones ilegales, y las familias y asociaciones tienen que seguir luchando juzgado
a juzgado y caso por caso, lo cual es inexplicable e indignante… ¿Cómo cabía esperar
entonces que se investigaran en profundidad y globalmente casos como los de los
estafados por préstamos hipotecarios? Comprenderá que con tales antecedentes yo
no fuera demasiado optimista.
Pero eso no implica que estuviera dispuesto a rendirme antes
de empezar. No hay causa perdida a priori. Tenía claro que había que diseñar
una estrategia y no dar palos de ciego, que había que dar una serie de pasos
planificados, porque estamos ante redes criminales organizadas.
Y, sobre todo, sigo teniendo clarísimo que voy a apurar
hasta la última posibilidad, nacional o supranacional, de que esto no quede
impune. Creo que, partiendo de donde partíamos, hemos conseguido avances relevantes.
Y en ello seguimos, por supuesto mientras que los propios afectados así lo
quieran.
- Entonces, hoy sí
está más cerca esa posible investigación judicial global…
Son ya cuatro los Juzgados de Instrucción de Madrid que han
apreciado que estamos ante una presunta estafa masiva y continuada, con gran número
de afectados en toda España, y han considerado que es competencia de los Juzgados Centrales de Instrucción. Ahora la pelota está en el tejado de la
Audiencia Nacional. Si acepta la inhibición que han hecho a su favor, mi
pronóstico es que se produciría un vuelco enorme en estas causas.
- ¿Usted cree que
verá algún día condenados a los responsables de estas estafas?
Yo soy muy seguidor de la filosofía del Cholo Simeone:
partido a partido... Lo que ahora toca es conseguir que la Audiencia Nacional asuma
la competencia. Y estamos moviéndonos para ello.
- ¿Es importante que
se asocien los afectados?
Importantísimo. La unión de las víctimas a mí me parece
fundamental. Si se hace bien, es un instrumento muy valioso.
Recientemente se ha creado una asociación, Stop Estafadores,
que hasta el momento está haciendo una labor encomiable de investigación, de
difusión, de apoyo a los afectados… Ojalá siga ese camino. Antes de que
existiera la asociación, su actual presidente, Juan Puche puso en marcha un
blog personal, Alerta Trama Estafadores, que ha servido para ofrecer
información a profesionales, a víctimas, a medios de comunicación… Sirvió para
aglutinar a los afectados y a quienes les defendemos. Sin aquella iniciativa
personal de Juan seguramente no estaríamos donde estamos. Y la asociación es
una forma de dar a todo eso continuidad y vertebración.
A mí me merece un enorme respeto que personas que viven
situaciones dramáticas sean capaces de sacar fuerzas de flaqueza, ponerse en
pie, organizarse y pelear por sus derechos. No digamos nada de aquellos estafados
que, además, renuncian a su legítimo anonimato y dan la cara públicamente en
los medios por los demás, eso ya me resulta admirable. Los afectados de estas
prácticas delictivas nos dan una lección cotidiana de dignidad.
- Pero, antes de Stop
Estafadores, usted colaboró con otra asociación…
Sí, e hicimos cosas muy interesantes, como la voluminosa
denuncia que redacté gratuitamente para que se presentara ante la Fiscalía de
la Audiencia Nacional, o la I Jornada sobre Estafas Hipotecarias en el Colegio
de Abogados de Madrid que tan buena acogida cosechó entre las víctimas y los
profesionales, o nuestra comparecencia en las Cortes de Aragón que resultó muy
fructífera y abrió puertas…
- Pero, perdóneme que
insista, entonces, ¿por qué se desvinculó de aquella asociación?
Mire, yo quiero que las entidades de este tipo sean
transparentes en su funcionamiento, que sean democráticas internamente, que
estén controladas y gestionadas por los propios afectados, que mi trabajo se
respete, y que dediquen su esfuerzo a luchar contra los estafadores y no a provocar
enfrentamientos entre afectados. No nos podemos permitir el lujo de perder
tiempo ni fuerzas.
- En esta lucha,
¿cuál ha sido el peor y el mejor momento que ha vivido?
Recuerdo muchos momentos duros, porque detrás de cada caso
hay un drama familiar y he escuchado en mi despacho auténticas tragedias. Pero
no tengo duda de que el peor momento, sin duda, fue el suicidio de Javier, una
noticia que nos golpeó a todos. No era cliente mío, pero le había conocido en
una reunión de afectados en la Comunidad Valenciana, compartimos la jornada, conversamos,
me acercó en su furgoneta para que yo tomara el tren de vuelta... Y no lo volví
a ver con vida. Consigamos lo que consigamos en el futuro, eso ya es
irreversible: un hijo crecerá sin padre y una mujer valiente, Monchi, tendrá que
salir adelante sin el apoyo de su pareja.
Y buenos momentos también ha habido muchos, por suerte. Si
tengo que citar sólo uno muy intenso, me viene enseguida a la mente cuando se
suspendió, cautelarmente e in extremis, el desalojo de Miguel Ángel de su
vivienda. Aquello estaba siendo una pesadilla para esa familia, que se podía
quedar en la calle porque su casa ya había sido adjudicada a uno de los ejecutores
de una trama. Parecía imposible la reapertura de la causa penal, que estaba
archivada. Apenas unos días antes de la fecha prevista para el lanzamiento lo
logramos y se abrió una esperanza que ojalá se convierta en definitiva.
También fue un gran momento el día que el Juzgado de Instrucción nº 3 de Madrid acordó enviar ocho causas a la Audiencia Nacional.
Luego se le han unido otros tres juzgados en la misma decisión. Y eso es
justamente lo que veníamos pidiendo desde el primer día: que hubiera una
investigación conjunta. Pero la decisión del 3 abrió ese camino que podría cambiar
la suerte de centenares de personas.
- ¿Usted ha sufrido amenazas?
Del cabecilla de la principal trama, la verdad es que no. A
diferencia de otras personas, porque hay que recordar que sí fue condenado por sentencia firme por amenazar de muerte a una compañera, una abogada de Sevilla.
Alguno de sus intermediarios sí me ha lanzado mensajes a través de mis
clientes, como “dile al listo de tu abogado que se ande con cuidado” y cosas
así. Pero no me amedrentan lo más mínimo.
Lo que sí han intentado es silenciarme por vía legal: que
siga llevando los asuntos pero que me esté calladito, que no denuncie
públicamente estas tramas en los medios, porque eso les hace daño a la hora de
seguir operando. Presentaron una queja contra mí ante Deontología del Colegio
de Abogados de Madrid, que la archivó motivadamente. Luego una demanda para que
quitase de mi blog un artículo donde comentaba el suicidio de Javier, pero
tampoco lo consiguieron. Aseguraron que presentarían una querella criminal
contra mí, y estoy a la espera.
- ¿Hay afectados en
Galicia?
Sí, claro, los hay por toda España. Precisamente una de las
personas del núcleo inicial que puso en marcha la asociación Stop Estafadores, Xela,
es de Lugo. Aunque el mayor número de víctimas en esa comunidad se concentra,
según los datos que manejo, en las provincias de A Coruña y Pontevedra.
0 comentarios:
Publicar un comentario